sábado, 21 de mayo de 2016



Un día de campo (12 de marzo de 1950). El pintor Gustavo Hurtado Muro (1878-1960), hijo de Publio Hurtado, con su familia pasando un día de campo en La Montaña.

Gustavo Hurtado Muro
(Cáceres, 1878-1960)

El día 16 de diciembre de 1960, cuando contaba 88 años de edad, falleció en Cáceres don Gustavo Hurtado Muro, relevante personalidad de la vida cacereña sobre todo en el elevado campo artístico.

Don Gustavo –el mayor de los hijos del matrimonio de don Publio Hurtado, patriarca de las letras extremeñas, con doña María del Rosario Muro- nació en la prócer y heráldica ciudad cacerense el día 7 de octubre de 1878, siendo bautizado en la actual concatedral gótica de Santa maría, el día 17 del mismo mes.

Aficionado a la pintura desde bien pequeño, comenzó sus estudios sobre este arte bajo la dirección de don Andrés Valiente y, posteriormente, de don Luis Perate, profesor de dibujo del Instituto.

Cuando Hurtado Muro terminó el bachillerato marchó a Madrid para ingresar muy pronto en la Escuela de Arquitectura, centro académico en el que permaneció tres años.

También por entonces ingreso en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. Ante la imposibilidad de simultanear los estudios en ambos centros, abandonó los de Arquitectura para dedicarse de lleno y por entero a los de pintura, bajo la dirección de los maestros Muñoz Degrain, Diósodro de la Puebla y Moreno Carbonero.

Gustavo Hurtado obtuvo una segunda Medalla el primer año y la primera al siguiente. El año 1900 concluyó sus estudios en la escuela de Bellas Artes, pero no conforme aún con la formación adquirida, perfeccionó sus conocimientos en los estudios de los artistas don Emilio Sala y don Francisco Pradilla.

Con el bagaje alcanzado, con la sólida preparación que poseía y con su vocación docente, Hurtado opositó a la cátedra de Dibujo del Instituto de Cáceres, que desempeño hasta su jubilación en 1948.

En 1907 fu nombrado profesor de Dibujo Geométrico de la escuela de artes industriales, creada por la Diputación Provincial.

En 1917 ganó por oposición la cátedra de Dibujo de la Escuela Normal del Magisterio de Cáceres.

En esos centros Hurtado realizó una magnífica labor, formando tantas generaciones de cacereños que hoy rinden el más sincero tributo admirativo al genial maestro.

En abril de 1905 se designo al ínclito cacereño Correspondiente de la Real Academia De Bellas Artes de San Fernando.

También perteneció desde muy joven a la Comisión Provincial de Monumento, al Ateneo cacereño y Museo Provincia.

Nos parece obligado dejar constancia de los afanes de don Gustavo por la defensa del tesoro artístico cacereño.

Aunque nada aficionado a la política, el profesor Hurtado fue nombrado Síndico del Ayuntamiento en 1923, concejal en los años 1927 y 1930, y diputado provincial en 1936.

Debe ser subrayada especialmente la actividad de Hurtado como pintor. Dotado de gran inquietud y exquisito temperamento artístico, se hallaba en posesión de un pincel admirable, prodigioso, con el que produjo cuadros de las más ricas calidades.

Poco dado a exponer sus obras, participo, sin embargo, en algunas exposiciones, cabiendo citar, entre las más importantes, la Regional de Bellas Artes, Industria y Agricultura de Béjar en 1903, la nacional de 1904 y la Regional Extremeña de Cáceres en 1924.

Algunos de los trabajos el famosos pintor cacereño pudieron contemplarse de nuevo poco antes de su fallecimiento en la capital.

En el orden humano, el venerable profesor estaba adornado de las más finas cualidades.

Por todo ello, la desaparición de don Gustavo Hurtado Muro causó el más hondo pesar en toda Extremadura.

A través del cronista, “Alcántara” expresa el testimonio de su sincera condolencia a la familia de eximio pintor.

Fuente: VALERIANO GUTIÉRREZ MACÍAS

sábado, 23 de abril de 2016

Buenos días amig@s y feliz día de San Jorge. Aquí os dejo una vista parcial de nuestra querida ciudad del año 1968. Ediciones F.I.T.E.R. Ref.8.708

miércoles, 20 de abril de 2016

Fotografia de Javier hacia 1950. Se puede observar, a parte del crecimiento de Cáceres con respecto a la actualidad, detalles relacionados con la ausencia de emblemáticas edificaciones posteriores que vemos hoy en día, como el Hospital San Pedro de Alcántara, la "Torre de Cáceres", edificio Norba, Instituto el Brocense, Instituto Norba Caesarina, etc... También observamos la ausencia de edificaciones de menor o mayor importancia, o de lugares de interés para los viajeros, como la estación de trenes en Los Fratres.

martes, 19 de abril de 2016

domingo, 3 de abril de 2016

miércoles, 30 de marzo de 2016

Fotografía tomada por un viajero francés o alemán antes del 23 de julio de 1937. A aquel viajero debió llamarle la atención la fachada principal del Palacio de Mayoralgo. Sin duda, no imaginó que el 23 de julio de 1937, a las 9.30 de la mañana, cinco aviones soviéticos Tupolev SB2, al mando del bando republicano, arrojarían 18 bombas sobre Cáceres, destruyendo una de ellas la fachada principal que él estaba fotografiando y parte del Palacio de Mayoralgo, Aquellos bombarderos, SB2, llamados katiuskas por el bando republicano o Martin bomber por el bando sublevado, causaron, además de los daños materiales, casi medio centenar de muertos y numerosos heridos. La fachada principal de este palacio se construyó en el año 1537 y tras su destrucción en la guerra civl fue reconstruida casi fielmente a la original, aunque hubo un elemento que no se respetó, sabéis cuál es?

domingo, 20 de marzo de 2016

Para los creyentes y para los agnósticos, para los amantes de la fotografía y los que no, para los admiradores del arte sacro y los que no, para los cacereños y los forasteros, para tod@s y para cada un@ aquí os dejo la patrona de la ciudad, en lo mas alto de Cáceres, sobre las cabezas de tod@s los cacereñ@s, la Virgen de la Montaña. Espero que os guste, al menos, la fotografía.

viernes, 19 de febrero de 2016

Antigua postal escrita desde Cáceres el 30 de mayo de 1907. En la imagen aparecen las escaleras de acceso al Arco de la Estrella (Arquo de la Estrella). A la izquierda, sobre la puerta, un cartel con la leyenda "leche de vaca" (ni de burra, ni de cabra). Unos niños posan para el fotógrafo delante de lo que era una fuente en su época, orgullosos de su nudo hecho a base de cuerdas; mientras, una cacereña sube con su pequeña por la parte derecha de las escaleras (la parte izquierda era usada como bajada). Otro grupo de cacereñ@s permanece atento al disparo del fotógrafo delante del Arco de la Estrella. Tengo mis dudas respecto a la datación de la fotografía. He visto la fotografía datada en 1903, no dudo que ese año fuera el año de impresión de la foto-postal, pero la foto-postal tiene en su parte trasera el anagrama E. J. G. (Eusebio Dumas Juliá García-Núñez), el cual falleció el 05 de enero de 1895 en Madrid. Es posible que sus fotografías fueran editadas en formato foto-postal bastantes años después de su fallecimiento, pero la fotografía como tal, es anterior a 1895." Cáceres 30/5/1907 Dear friend you can write me to the Covilha. Your friend José ....."

sábado, 23 de enero de 2016

sábado, 9 de enero de 2016

En el siglo XIII, una familia procedente de Ávila, los Blázquez-Mayoralgo, se instala en la ciudad de Cáceres.

Unos años antes el rey Alfonso IX de León dictaba los fueros de Cáceres tras la reconquista de la ciudad. Estos fueros, intentan sobre todo, alentar la repoblación de la misma. Mediante estos fueros, Alfonso IX dictó una serie de normas institucionales por las que a partir de entonces se regiría la vida en la ciudad:
-Se reconoce a los pobladores de la misma como hombres libres.
-Se prohíbe a las órdenes militares y religiosas que se establezcan dentro del recinto amurallado.
-Se prohíbe que ningún poblador de la ciudad pueda venderles a las órdenes anteriormente citadas propiedades intramuros.

Poco después, el 12 de marzo de 1231, el rey Fernando III ratificó dichos fueros y los aumentó decretando que:

En la ciudad no podrían levantarse más palacios que uno para el rey y otro para el obispo para de esa forma dejar claro en manos de quien recaía la verdadera autoridad en la ciudad.

Todos los que desearan ir a repoblar Cáceres serían iguales ante los ojos de la ley ya fueran cristianos, judíos o sarracenos, sin que ninguno de ellos tuviera que responder por actos realizados antes de la reconquista de la ciudad.

Dos siglos después (1479), los Reyes Católicos visitarían Cáceres y jurarían sus fueros.

Ante esta situación, la recién llegada familia Blázquez-Mayoralgo, se instala fuera de los muros de la ciudad por consejo del rey Alfonso IX, posteriormente en el siglo XV fue levantada la prohibición y construyó el Palacio en la plaza de Santa María. Esta familia consiguió disponer de gran poder económico y social. El gran poder de esta familia de la nobleza les permitió la constitución del primer mayorazgo de la Provincia de Cáceres el 18 de junio de 1320. De este hecho, se produce después de un trastoque lingüístico el nombre del apellido familiar Mayoralgo.

El mayorazgo era una institución del antiguo derecho castellano que permitía mantener un conjunto de bienes vinculados entre si de manera que no pudiera nunca romperse este vínculo. Los bienes así vinculados pasaban al heredero, normalmente el mayor de los hijos, de forma que el grueso del patrimonio de una familia no se diseminaba, sino que sólo podía aumentar.

Separado del Palacio Episcopal por la Calle del Arco de la Estrella se alza la rotunda construcción del Palacio de Mayoralgo, bajo cuyos cimientos han aparecido importantísimos restos desde la época romana. El Palacio de Mayoralgo, como la mayor parte de las construcciones cacereñas, es fruto de la integración de varios inmuebles. Lo que hoy es el jardín fueron en su día las Casas del Maestre, pertenecientes a la madre de Gómez de Solís. La fachada lateral forma parte del solar de una de las ramas de los Aldana, cuya portada gótica se reabrió a la mitad del siglo XX y cuya torre se situaría hacia la esquina de la Plaza de Santa María. Las casas originarias de los Blázquez serían aquéllas que se situarían hacia la Cuesta de Aldana, con dos torres, una que se integró en la fachada principal y otra en el actual jardín, que se ha reconstruido en la actual reforma. La entrada a la casa se realizaría por un fondo de saco (hoy desaparecido) que partía de la Calle de la Estrella.

La fachada principal es espectacular, aunque reconstruida después de la bomba que sobre el palacio cayó en la Guerra Civil (23 de julio de 1937), y se levantó entre 1534 y 1538, en esa época en que muchas construcciones perdieron su carácter de casa-fuerte y se rediseñaron con aires palaciegos. En esa altura desaparecieron las dos torres que daban a Santa María.

Amplia portada de medio punto, con grandes dovelas planas, dos hermosos balcones de ajimez y el espectacular blasón de los Mayoralgo, que milagrosamente cayó entero. El escudo presenta yelmo con un león por cimera y lambrequines haciendo atauriques y gruteschi. Las armas son excepcionales en la heráldica ibérica, en campo de oro media águila de sable media torre al natural. Esto es, un partido dimidiado del que pocos casos se encuentran por estos pagos. Bajo el blasón, una inscripción sacada de dos versículos del Antiguo Testamento y que hace alusión al mismo: Esto nobis turris fortis et renovavit, sicut aquilae, juventutem nostram . (Sé Tú señor para nosotros la torre de fortaleza y se renovará como la del águila, nuestra juventud)

Formato tarjeta postal. Edición Manuel Cilleros. Hacia 1910. Esta fotografía, al igual que otras, fueron encargadas por Manuel Cilleros a un fotógrafo francés, probablemente se tratara de Bienaime.

Fuentes: cacerespasoapasopiedraapiedra.blogspot.com.es , elperiodicoextremadura.com

viernes, 8 de enero de 2016

Fotografía coloreada del Hospital Virgen de La Montaña hacia 1910. Edición "Viuda de Manuel Cilleros". Formato foto-postal.

viernes, 1 de enero de 2016

Panorámica de Cáceres el primer día del año 2016 con amenaza de lluvia. Feliz año nuevos a tod@s.